La asamblea general del COI (Comité Olímpico Internacional), celebrada en Copenhague, Dinamarca, el 10 de octubre de 2009, decidió incluir de forma oficial el rugby y el golf para las olimpiadas de 2016, en Río de Janeiro (Brasil), y las de 2020 (aún sin decidir en ese momento).
El mundo del rugby había venido luchando para convencer al COI con las siguientes palabras clave: “Rugby como deporte olímpico”, y el resultado fue la inclusión del “rugby a siete”. La razón de esta inclusión es que, si es rugby a siete, se puede llegar a disputar torneos, ya que son muchos los países que pueden participar en los juegos si es en esta disciplina. Con la inclusión del rugby como deporte olímpico, la IRB cumplió sus deseos de querer difundir y desarrollar el rugby a nivel mundial.
La inclusión en las olimpiadas del rugby a siete, tanto masculino como femenino, señaló la urgencia de fortalecer a la Selección de Rugby 7 de Japón.
La directora de la Selección de Japón Femenina, Noriko Kishida, se muestra ambiciosa: “Con la inclusión en las olimpiadas, nuestras expectativas están creciendo. Aprovechando esta oportunidad, vamos a aspirar a expandir nuestras bases, buscando aumentar el reconocimiento del rugby femenino. Aunque ya hemos venido convocando selecciones de categorías juveniles, vamos a poner más esfuerzo en descubrir nuevos talentos como jugadoras de gran rapidez, y hacemos un llamamiento al público de manera activa, aumentando las ocasiones de jugar con público”. A su vez, prevé que la lucha en Asia entre China, Kazajistán, Tailandia y Japón va a ser muy reñida, por lo dice que no es prudente ser tan optimista.
El mundo del rugby había venido luchando para convencer al COI con las siguientes palabras clave: “Rugby como deporte olímpico”, y el resultado fue la inclusión del “rugby a siete”. La razón de esta inclusión es que, si es rugby a siete, se puede llegar a disputar torneos, ya que son muchos los países que pueden participar en los juegos si es en esta disciplina. Con la inclusión del rugby como deporte olímpico, la IRB cumplió sus deseos de querer difundir y desarrollar el rugby a nivel mundial.
La inclusión en las olimpiadas del rugby a siete, tanto masculino como femenino, señaló la urgencia de fortalecer a la Selección de Rugby 7 de Japón.
La directora de la Selección de Japón Femenina, Noriko Kishida, se muestra ambiciosa: “Con la inclusión en las olimpiadas, nuestras expectativas están creciendo. Aprovechando esta oportunidad, vamos a aspirar a expandir nuestras bases, buscando aumentar el reconocimiento del rugby femenino. Aunque ya hemos venido convocando selecciones de categorías juveniles, vamos a poner más esfuerzo en descubrir nuevos talentos como jugadoras de gran rapidez, y hacemos un llamamiento al público de manera activa, aumentando las ocasiones de jugar con público”. A su vez, prevé que la lucha en Asia entre China, Kazajistán, Tailandia y Japón va a ser muy reñida, por lo dice que no es prudente ser tan optimista.